El Capitalismo:
El capitalismo es el sistema económico en el cual
los individuos y las empresas de negocios llevan a cabo la producción y el
intercambio de bienes y servicios a través de diversas transacciones en las que
intervienen los precios y los diferentes mercados. Lo cual, se origina en la
antigüedad, su desarrollo es un fenómeno europeo que fue evolucionando en
distintas etapas hasta considerarse establecido en la segunda mitad del siglo
XIX.
Este sistema fue
abriendo paso hacia a todo el mundo, siendo el sistema
socioeconómico casi exclusivo en el ámbito mundial hasta el estallido de la
Primera Guerra Mundial, tras la cual se estableció un nuevo sistema, el
comunismo, opuesto al capitalismo. Sin embrago, se puede decir que
que el filósofo Adam Smith fue el fundador del sistema
capitalista, siendo éste, el primero en describir los principios económicos
básicos que definen al capitalismo.
De esta manera, los
economistas clásicos que siguieron las ideas de Adam Smith no podían explicar
estos altibajos de la actividad económica y consideraban que era el precio
inevitable que había que pagar por el progreso que permitía el desarrollo
capitalista. Las críticas marxistas y las frecuentes depresiones económicas que
se sucedían en los principales países capitalistas ayudaron a la creación de
movimientos sindicales que luchaban para lograr aumentos salariales,
disminución de la jornada laboral y mejores condiciones laborales.
Mientras que,
El Socialismo:
Es un orden socioeconómico
basado en la propiedad publica de los medios de produccion , el control colectivo y planificado de la economía por parte de la sociedad como un entero. También podríamos decir que es toda
teoría, doctrina o movimiento que aboga por su implantación .
De este modo, el
objetivo final de los socialistas era establecer una sociedad comunista o sin
clases, se han centrado cada vez más en reformas sociales realizadas en el seno
del capitalismo. Lo cual, tuvo sus inicios en la época de la Revolución Francesa. Asimismo, este término comenzó a ser utilizado de forma
habitual en la primera mitad del siglo XIX por los intelectuales
radicales, que se consideraban los verdaderos herederos de la Ilustración tras comprobar los efectos sociales que trajo consigo la
Revolución Industrial. Entre
sus primeros teóricos se encontraban el aristócrata francés conde de Saint-Simon,
Charles Fourier
y el empresario británico y doctrinario utópico Robert Owen. Como otros
pensadores, se oponían al capitalismo por razones éticas y prácticas.
Alemania Nazi:
Nazi es
la contracción de la palabra Alemana
Nationalsozialistische, que
significa 'nacionalsocialista, y hace referencia a todo lo relacionado con el
régimen que gobernó Alemania de 1.933 a 1.945
con la llegada al poder del Partido Nacionalsocialista Alemán de los Trabajadores.
Es por ende, que El
nazismo es una ideología alemana gestada en los años 20
pero que no alcanzará importancia hasta los años 30,
momento en que las duras condiciones de paz impuestas en el Tratado de Versalles (1.919) se juntan con
la grave crisis mundial del Jueves Negro en 1.929 (ver Gran Depresion). En Alemania la situación es más acuciante aún, ya que a
los devastadores efectos económicos se sumaba la obligación de pagar el tributo
de la derrota en la Primera Guerra Mundial, y el descontento
popular ante la injusta situación que hacía que las calles se llenaran de
manifestaciones extremistas de toda índole, tanto de izquierda como de derecha.
En
1933, cuando Hitler asumió poder en el gobierno alemán, el uso del termino
disminuyó en Alemania, aunque en Austria sus oponentes lo continuaron usando
con una connotación despectiva. A partir de eso, el término ha adquirido una connotación crecientemente
peyorativa
Esta situación culmina con el fuerte
descrédito de las democracias liberales, dado que las dictaduras que surgieron
demostraron ser capaces de controlar y resolver las crisis más efectivamente
que las democracias.